Otra controversia

Al crimen organizado se le ha permitido actuar con total impunidad por dos décadas y en eso ha vivido una descomposición que ha dividido a sus células que en algunos casos se disputan “las plazas”, generando muchas desgracias.
Aparte, la actividad delictiva se ha diversificado, en secuestros, robos, levantones –casi todos a jovencitas con resultados mortales- afectando ya a miles de familias en el país, que han perdido a algún ser querido asesinado, o sencillamente sin aparecer y que no están dispuestas a perdonar nada.
Por eso levantó polémica eso de que “Oficialmente ya no hay guerra. Nosotros queremos la paz”, frase dicha por el presidente López Obrador tras ser cuestionado sobre el número de capos detenidos como parte de su estrategia antihuachicol, en el entendido de que esa actividad es crimen organizado, asociación delictuosa.
Esperemos que la idea de que la estrategia permita disminuir el número de homicidios, robos, secuestros, levantones y de seguridad en las calles, porque ya hasta en nuestra ciudad otrora “la más segura”, es un riesgo latente luego de notificaciones de asaltos y robos a establecimientos y transeúntes.