Radicalidad

Aunque sean solo catorce días, a los meses de paro que ha practicado la CNTE, el problema de Michoacán si es en verdad preocupante pues genera pérdidas millonarias por el bloqueo de vías férreas en esa entidad, cuando ya se le está dando respuesta a sus demandas.
Es cierto que el gobernador de ese estado, Silvano Aureoles, un hombre cuanto ambicioso como frustrado, que no logró la candidatura del PRD a la presidencia -y que sabía que deteniendo pagos al magisterio provocaría su reacción-, que ha tenido diferendos con López Obrador con el tema de los delegados, apenas muestra signos de negociación una vez que el gobierno federal radicó mil millones de pesos para el pago de quincenas caídas al magisterio de la sección 18.
Sin embargo la CNTE busca otro tipo de negociación, al parecer, pues acusa que Aureoles no tiene voluntad política cuando, ya está convocada la mesa para el dialogo con el propio Esteban Moctezuma, el secretario de educación, quien ayer estuvo presente en la cámara de diputados durante el arranque de los trabajos de análisis de la nueva ley de educación, con la que se va a derogar la reforma peñista.
López Obrador ya anunció que no se va a dejar chantajear, y en medio de esto, por enésima vez, son los alumnos los que pagan las consecuencias, muy aparte de los comerciantes y empresarios a los que nadie -como ha pasado en Guerrero, Oaxaca o Chiapas-, les va a pagar sus pérdidas, lo que tampoco es justo.