Al Son del texto
Y es que sorprendió a toda la eficacia con que se dio con el asesino de una persona encontrada descuartizada en las márgenes del río El Sabinal en la capital del estado, que por el modus operandi pareció un ajuste de cuentas del narco, y que generó especulación sobre el particular en un mínimo 24 horas.
Esas fueron suficientes desde que se dio a conocer la denuncia hasta su esclarecimiento.
Pero ¿Cómo va a pasar eso en la ciudad más segura?
Pues ya es un hecho, aunque al parecer por asuntos personales, vemos que hay personas entre nosotros que son capaces de esas atrocidades, y que desde luego son motivo de cuestionamientos sobre la seguridad que todo el país reclama, y que motiva –como muchas compañeras- a cuidarse hasta de abordar cualquier taxi, y en el extremo el no ir muy temprano o noche a un OXXO, ya con muchos eventos de asaltos y hasta asesinato, sin que esa tienda de conveniencia haga lo necesario para la seguridad de sus clientes.
De todos modos, aun los cuestionamientos ahora por la eficacia, es importante que quede claro que fue por motivos personales, porque en el caso contrario, sí que habría que preocuparse que células delictivas estuvieran presentes en la capital chiapaneca, a la usanza de otras entidades en que se practica por parte del crimen organizado ese modo de descuartizamiento, que denota lo sanguinario más allá del ajusticiamiento, la tortura, sino el mensaje entre criminales.
Zona libre de eso, por fortuna.
A diario se lee que, en entidades como Guerrero o Veracruz, se dan asesinatos, secuestros, levantones, o de plano enfrentamientos como en Sonora, Estado de México, entre autoridades y criminales, con varios muertos en consecuencia, y a veces caen civiles que por mala suerte son alcanzados por las balas cruzadas.
Desde luego que no se trata de minimizar lo que sucede en Tuxtla y la ola de asaltos o robos los que deben reducirse. Pero sí ubicar que los índices delictivos o de criminalidad no tienen nada que ver con los promedios en otros puntos del país, aunque es cierto lo que señala la comuna sobre el que ya no es nuestra ciudad condición de seguridad para tener como antes, las puertas abiertas a la calle, sin el temor a ser asaltados en el propio domicilio, pues ni negar que ese registro, es constante en casas habitación.
Es lamentable que en algunos la condición humana y el respeto a la vida sea lo de menos, y que ésta pronta captura sirva de ejemplo que a veces rápido y otras no tanto –las más impunes- se aplica la justicia, en este caso para quien fue destazado por su cuñado.
