EDITORIAL

Un PRI sin rumbo

Un “confesionario” a éstas alturas del partido es demasiado tarde.

El priismo, los priistas, no cambian sus métodos del todo por el todo por sobre todo, incluyendo sus estatutos.

Dejaron en claro que no son de fiar ni entre ellos en la misma casa, y desde luego, para el electorado o interesados que siguieron su proceso, sencillamente fue más de lo mismo en el preámbulo de los estertores de ese partido, en clara caída.

No será poco lo que se jugará el PRI en 2021: de trece gubernaturas en disputa, ocho están en su dominio, parte de sus últimos bastiones: Colima, Guerrero, Sinaloa, San Luis Potosí, Campeche, Sonora, Zacatecas y Tlaxcala.

De cinco disputadas de 2018 y dos en 2019 no ganó ni una.

Son cifras contundentes.

Y todavía con esas manías que no le granjean imagen al otrora invencible y hoy un partido que parece será utilizado hasta el último momento de su vida electoral por lo que queda de sus “cuadros distinguidos”.

Print Friendly, PDF & Email

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *