AL SON DEL TEXTO

Al son del texto

Tina Rodríguez

Ahogado el niño tapado el pozo

Desde cuándo se ha dado el reclamo popular de que automovilistas y servicio público de pasaje, exceden a diario la velocidad, en ocasiones con consecuencias lamentables.
Cuando se registran estos eventos de atropellamientos mortales o de varios lesionados, en especial en el servicio público, la responsabilidad solo recae en el conductor, mientras los concesionarios que los contrataron, solo se hacen cargo de lo referente a la unidad, sin que reciban ningún requerimiento por parte de la autoridad.
La situación de alta velocidad debe ser ya combatida, muchas personas resultan lesionadas y muertas por ésta falta de precaución, observándose que se promociona más un evento incluso cultural de relevancia, que una seria campaña para que se respete las normas de vialidad.
Lo vimos en la visita papal.
La seguridad pública debe comprender la integridad de los usuarios en el transporte colectivo, el cual es pésimo. Desde la transformación interior de las unidades para incrementar su capacidad de transporte de personas, hasta la incomodidad que ello implica, y desde luego, un chofer acelerado que no respeta ninguna regla y por lo tanto la seguridad de “su” pasaje, lo que debería ser una prioridad no solo de la autoridad, sino también del concesionario.
Son los usuarios su objetivo y lucro, y aun con eso ¿no los cuidan?
Una serie de accidentes de tránsito y atropellamientos mortales se han registrado en los últimos días, y uno de éstos llamó la atención pública, como fue el caso tremendo del ciclista atropellado y muerto por un auto fantasma que invadió el carrilito de guarnición inexplicablemente, pues en el libramiento norte hay dos carriles amplios para transitar.
La pregunta sin respuesta motivó un operativo tardía para medir la velocidad con que transitan los automovilistas, y que no debe exceder de 80 kilómetros, lo que motivó protestas porque no estamos acostumbrados a tan regulación, y obvio la multa.
Solo esperemos que no sea una llamarada de petate, y que el operativo sea permanente, en especial en esa zona del mirador “Los amorosos”, que los automovilistas toman como autopista aún se trate de una zona de asistencia pública y se realicen eventos culturales.
Sorprende, la verdad esa falta de previsión en una ciudad que amerita duplicar todo, pues ya creció, y solo esperemos que éste operativo cree conciencia entre los conductores y automovilistas, y no volver a saber de un atropellamiento tan sorprendente como injusto, a un padre de familia que solo salió a hacer deporte.

Print Friendly, PDF & Email

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *