- Argumentó que sus adversarios han aprovechado el caso Ayotzinapa para darle un uso político y atacar su administración
Mesa de Redacción.- Este fin de semana, el presidente Andrés Manuel López Obrador denunció que hay una campaña de desprestigio para socavar y debilitar al Ejército y la Marina.
En ese sentido, López Obrador fue enfático al descalificar a las organizaciones de derechos humanos que las han cuestionado porque, aseguró, muchas de ellas actúan sin profesionalismo ni ética.
Sus declaraciones se dan luego de que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) denunció en su último informe que el Ejército y la Marina han negado y ocultado información vital para resolver el caso de los normalistas de Ayotzinapa, posición que acompañaron la Oficina en México del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) y un centenar de organizaciones.
“En general, no tienen razón, es una campaña para socavar, para debilitar a las fuerzas armadas. Si fuese cierto lo que ellos sostienen, no estarían dos generales en la cárcel por la desaparición de los jóvenes de Ayotzinapa y otros elementos (militares). Han estado ayudando (la Defensa y la Marina), cooperando para que se haga justicia. Lo que sucede es que hay una tendencia a culpar a las instituciones, en este caso al Ejército Mexicano, sin pruebas”, expresó.
El ejecutivo Federal señaló que se ha avanzando en las indagatorias y subrayó, sobre todo, que la prioridad es la búsqueda de los 43 normalistas desaparecidos de manera forzada.
“No hay un gobierno en el mundo, en la historia reciente, que haya actuado como lo estamos haciendo nosotros en contra de altas autoridades. Díganme: ¿en qué país está preso el ex procurador de la República? ¿En qué país hay dos generales presos por el mismo asunto? ¿En qué país hay 120 detenidos? En ningún lado. Sin embargo, no están conformes”, expuso.
Consideró que sus adversarios y seudodefensores de derechos humanos se han aprovechado de este caso para darle un uso político y atacar a su administración. Por eso la campaña en contra de las fuerzas armadas que están cooperando, que nos están ayudando, no están ocultando información en nada. Tienen muy claro que si un miembro de las fuerzas armadas, dos, tres, cinco, 20, 30, actuaron mal, no se puede permitir que por esa mala actuación, ocultando los hechos, se afecte una institución tan importante como la Secretaría de la Defensa.
Finalmente, el presidente arremetió de nuevo contra la ONU y otros organismos, como la OEA, que, dijo, sólo actúan en función de los intereses que representan. Y preguntó si alguien había escuchado algún posicionamiento de Naciones Unidas “en contra del narcoestado que se estableció cuando Felipe Calderón?” o ¿en contra de (Genaro) García Luna y de la desaparición de personas durante ese gobierno? ¡No! ¿Han manifestado los de la ONU alguna preocupación por la destitución del presidente legal, legítimo de Perú?… ¡No! ¡Ya basta de simular!