Un cosmonauta ruso abandona una caminata espacial debido a problemas con su traje

Los cosmonautas llevaban un poco más de dos horas en su caminata espacial cuando se detectó una baja de voltaje

La caminata espacial rusa del miércoles 17 de agosto no salió exactamente según lo planeado, ya que el traje espacial de un cosmonauta no funcionó correctamente y lo obligó a regresar a la Estación Espacial Internacional (EEI) debido a una caída inesperada en el voltaje.

Aproximadamente dos horas después de que comenzara la caminata espacial programada para instalar un brazo robótico gigante, el cosmonauta Oleg Artemyev informó que el voltaje de la batería de su traje espacial estaba bajo. El control de la misión le ordenó a Artemyev que regresara a la esclusa de aire y se conectara a la energía de la estación, mientras lo tranquilizaba: “No te preocupes, todo está bien. Estás bien”. Mientras Artemyev continuaba manipulando la bolsa de seguridad de la tripulación antes de regresar a la esclusa de aire, el control de la misión le dijo enérgicamente que “dejara todo lo que estaba haciendo y regresara”.

El cosmonauta Artemyev regresó a la EEI, dejando atrás a su compañero de caminata espacial Denis Matveev para terminar antes de que el control de la misión finalizara oficialmente el resto de la caminata espacial. Si el voltaje de la energía del traje espacial hubiera seguido cayendo, Artemyev habría perdido el contacto con el control de la misión, así como con el cosmonauta Matveev, y el ventilador del traje espacial ya no habría estado circulando aire, lo que dificultaría la respiración. Aunque el control de la misión declaró que el cosmonauta no estaba en peligro, Jonathan McDowell del Centro de Astrofísica Harvard-Smithsonian no estuvo de acuerdo. “Si estás trabajando afuera en el vacío con un traje espacial que no funciona bien, cualquiera que diga que no estás en peligro no entiende el problema”, dijo McDowell a Gizmodo en un correo electrónico. “Si fallara la energía eléctrica, el traje alcanzaría rápidamente una temperatura muy incómoda”.

Los dos cosmonautas comenzaron su trabajo de microgravedad alrededor de las 9:53 a.m. ET y estaban programados para pasar unas seis horas y media fuera del módulo Poisk de la estación, el cual está orientado al espacio. Artemyev y Matveev instalaron con éxito cámaras en el brazo robótico europeo fuera de la EEI y estaban en el proceso de quitar las restricciones de lanzamiento de las llamadas “manos” del brazo mecánico, cuando el voltaje comenzó a caer. También se suponía que los cosmonautas reubicarían un panel de control externo y probarían un mecanismo diseñado para agarrar cargas útiles a medida que llegan a la EEI, pero eso probablemente se reprogramará para otra caminata espacial.

El brazo de casi 12 metros de largo fue diseñado para la Agencia Espacial Europea (ESA) y se lanzó al espacio en julio de 2021. La tensión actual entre la ESA y su contraparte rusa había dejado la caminata espacial del miércoles en el limbo, ya que la agencia espacial rusa tomó represalias contra las sanciones impuestas debido a la guerra en Ucrania. El exjefe de Roscosmos, Dmitry Rogozin, amenazó recientemente con impedir el acceso al brazo robótico, e incluso ordenó a los cosmonautas que suspendieran su trabajo en el brazo robótico europeo y que, en su lugar, el director general de la ESA, Josef Aschbacher, “volara al espacio” y lo hiciera él mismo.

A pesar de la ligera falla en el entorno de microgravedad, ambos cosmonautas están a salvo dentro de la EEI, y la agencia espacial rusa está buscando reprogramar el resto de las tareas del brazo robótico para que pueda comenzar a operar fuera de la estación espacial internacional.

Via: Gizmodo