Conferencia de prensa de la organización “Las Abejas”, en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, en el 2016. Foto Elio Henríquez / Archivo
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Las Abejas se vuelven a deslindar de grupo que negocia con el gobierno

Hermann Bellinghausen/La Jornada/Ciudad de México.- La Organización de la Sociedad Civil de Las Abejas de Acteal declaró “por enésima vez” que, “bajo ninguna circunstancia”, acepta una solución amistosa con el Estado mexicano en el caso de la Masacre de Acteal. “Lo que hemos demandado, añaden, es el Informe de Fondo del Caso 12.790 Manuel Sántiz Culebra y Otros (Masacre de Acteal)”.

Al conmemorar, como lo hace el día 22 de cada mes, a las víctimas de la masacre ocurrida el 22 de diciembre de 1997 en Acteal, municipio de Chenalhó en Chiapas, la organización indígena aclaró las versiones difundidas el pasado 17 de julio según las cuales la Secretaría de Gobernación y las víctimas de Acteal firmarían un “acuerdo de solución amistosa”. Apuntan que “este grupo de sobrevivientes quienes están negociando con el gobierno, ya no son miembros de Las Abejas de Acteal, situación que la hemos aclarado varias veces”.

También que el caso de la masacre es de interés público. “Por lo mismo, pedimos al gobierno de México que públicamente precise que un grupo de sobrevivientes seguirá el camino del informe de fondo”. Las Abejas de Acteal también piden “respetuosamente” a los periodistas, medios de comunicación y todas las personas quienes tengan interés en abordar dicho tema, tengan la capacidad y ética de informar oportuna y veraz a la sociedad civil nacional e internacional”. Ello, para que la información sobre el tema “no se preste a confusiones”, ya que “como también es público, hemos aclarado a través de comunicados y conferencias de prensa que hay un grupo denominado, ‘Concejo Pacifista’ o ‘Concejo de Las Abejas’, que no son parte de Las Abejas de Acteal”. Este grupo “es el que tiene interés en la solución amistosa con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador”.

Retoman una nota publicada en este diario el 17 de julio, donde se menciona que el próximo tres de septiembre la Abejas de Acteal “firmarán un acuerdo de solución amistosa, y en esa fecha también se celebrará un acto de reconocimiento del Estado mexicano por los hechos que dieron lugar a la muerte de 45 indígenas tzotziles. El Estado mexicano y el grupo de víctimas coincidieron en que este acuerdo contribuirá para que juntos se avance en la reconstrucción del tejido social en Acteal y las comunidades indígenas aledañas”.

Ante ello, la Organización de la Sociedad Civil Las Abejas de Acteal cuestiona al Estado: “¿Cómo le va a hacer en su ‘acto de reconocimiento por los hechos a la muerte de 45 indígenas tzotziles, cuando este grupo de sobrevivientes que va a firmar la solución amistosa, no representa en su totalidad de las 45 hermanas y hermanos nuestros y más los cuatro bebés no nacidos?”

Supongamos, añaden, que el Estado hace un “reconocimiento” de su responsabilidad en la Masacre de Acteal “¿Acaso en ese acto, estará presente el Ejército Mexicano, también, para asumir su responsabilidad en la creación, entrenamiento, dotación de armas a los paramilitares del uso exclusivo del Ejército mexicano y del diseño del Plan de Campaña Chiapas 94?”.

La nota citada concluía: “El Estado mexicano y el grupo de víctimas coincidieron en que este acuerdo contribuirá para que juntos se avance en la reconstrucción del tejido social en Acteal”. Ante lo cual las Abejas señalan: “¿No se dan cuenta que esta firma de solución amistosa entre el Estado mexicano y el grupo ‘Concejo Pacifista o Concejo de Las Abejas’, generará más división entre los sobrevivientes, como lo hicieron los gobiernos priistas y panistas? Para nosotros, los sobrevivientes y familiares de las víctimas de la Masacre de Acteal, el mencionado ‘acto de reconocimiento’ de responsabilidad del Estado mexicano en la Masacre de Acteal no es más que dar atole con el dedo”.

En su mensaje, emitido desde Acteal mismo, la organización indígena admite: “Sabemos que en tiempos de la pandemia por el Covid 19 no es fácil la vida. Pero no basta enfocarnos sólo en el Covid 19. Analizando bien, pululan un sin fin de virus que sofocan a México. Uno de ellos es el caso del niño Dylan, desaparecido el pasado 30 de junio en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas”.

Denuncian también que los ricos “en complicidad” con el gobierno actual, “han usado de cortina de humo a la pandemia para imponer sus megaproyectos”. Sostienen finalmente que “un sin fin de atropellos y violaciones a los derechos humanos se cometen durante la pandemia”.

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