El próximo año se celebrará la elección presidencial en Bolivia y los desafíos que se presentan para el mandatario Evo Morales, van desde la posible intervención externa en los comicios, así como consolidarse ante los jóvenes de su país, coincidieron especialistas.
En el foro “Bolivia 2019: Repostulación de Evo Morales en la coyuntura latinoamericana”, organizado por Casa Lamm y La Jornada, el embajador de esa nación en Cuba, Juan Ramón Quintana, dijo que uno de los desafíos fundamentales es que el país “no depende solamente de su soberanía política-nacional”, pues se ha convertido en un actor político regional.
“Ha modificado su correlación de fuerza, la vida, la dinámica política interna, se ha transformado la economía, está en curso una transformación de la sociedad y por lo tanto también está de la continuidad de este proceso”, expuso.
Enfatizó el contexto que se vive en la región, en los últimos años de “procesos políticos muy controversiales, cuestionables que han dado lugar a una secuencia de golpes blandos, suaves, y que hoy día están prácticamente acabando con los procesos progresistas”, entre ellos, ejemplificó con lo casos de Dilma Rousseff, en Brasil; Cristina Kirchner, en Argentina, y Rafael Correa, en Ecuador.
Ramón Quintana dijo que antes de que llegara Evo Morales a la presidencia, “Bolivia era una semicolonia” pues estaba intervenido. El país “se gobernaba desde la embajada norteamericana”. La agencia de desarrollo USAID, añadió, “estaba presente en todos los ministerios”.
Katu Arkonada, colaborador de esta casa editorial, dijo que la principal fuerza de oposición en ese país son los medios de comunicación “ante un proceso de cambio exitoso” que ha sido inclusivo y ha provocado la redistribución de la riqueza.
Al día de hoy, señaló, Bolivia “va a ser el país de Sudamérica que más va a crecer, en torno al 4.7 por ciento, la previsión de crecimiento para este año cuando la media en América Latina es de dos por ciento”.
Y ante “la dificultad para criticar” estos procesos, añadió Arkonada, “están embarcados en la tarea de desgastar y golpear la figura de Evo Morales, un presidente con un claro componente antiimperialista, anticolonialista y anticapitalista”.
A un año de que se lleven a cabo las elecciones, en octubre de 2019 es la primera vuelta, el investigador vasco nacionalizado boliviano dijo que uno de los principales retos son los jóvenes en ese país. (Fuente/La Jornada)