Julián Rodríguez
El país del “orden y del progreso” esta teniendo una ligera pero rápida desaceleración de su situación en general, no solo de una desaceleración económica, sino que abarca todos los ámbitos posibles.
Durante el mandato de Lula da Silva, Brasil estaba peleando con los grandes del mundo, mantenía buenas y nuevas relaciones con otros países, había creado los BRICS entre otras muchas cosas; por no mencionar que ya la hacia de mediador en varios conflictos internacionales. Todo esto debido al realce de su economía y al descubrimiento de pozos petroleros, su PIB se mantenía estable y en crecimiento, al igual que ya era considerado como el líder en el cono sur; era la época dorada de Brasil y bastaba para más.
Todo comenzó con decadencia en las siguientes elecciones en las cual cuales Dilma Rousseff del PT ganó las elecciones y todo se vino para abajo. Comenzaba una época de decadencia que se fue agravando con el tiempo, “la formula Lula” no surtía tanto efecto; para el inicio de su segundo mandato, el PIB dejó de crecer, empezaron a tener manifestaciones en las calles de Brasil intentando el cese o despido de la presidenta, incluyendo a que interviniera el congreso y apelara esa decisión como tal.
Hubo una época de paz por el campeonato del mundo pero esto no calmo las aguas, empero, Dilma Rousseff empiezo a tomar malas decisiones, ya que después del escándalo de Petrobras esta, incentivo a unas reformas de limpieza en su gabinete. Por ende derivó que hiciera alianzas con otros partidos que no estaban de acuerdo con sus reformas, así como el descontento con los de su propio partido.
Y para engrandecer la molestia de la gente, los policías que se introducían en las favelas de Brasil tomaban represalias contra cualquiera que se viera como delincuente; haciendo énfasis en las personas de color. Un panorama muy trágico para Brasil y sobretodo para Dilma sus números habían caído.
Para este 2016 se ven muchos escenarios posibles que pueden cambiar el destino de Brasil:
I. El primero es que la ciudadanía haga mas protestas, y el gobierno tome más malas decisiones para que su congreso destituya a la presidenta de su mandato y llegue al poder alguien que regrese el poder y la época dorada a Brasil. (¿El regreso de Lula?)
II: El segundo escenario es que Dilma Rousseff tome cartas fuertes en el asunto para poder salvar el bote para si, pero no para sus colaboradores, esto alentaría a la población y le darían mas apoyo.
III. El tercer escenario que quizás sea el mas probable, seria que las cosas sigan como tal, aún y a pesar de las reformas, las manifestaciones, entre otras cosas y la población se quede conforme; quizás el gobierno mande una bomba de humo que disipe las aguas y todo se mantenga en control.
Sería una buena forma de preguntarse si Dilma Rousseff ante todo esto que ha sucedido es una persona sabia o una persona traidora.