Elio Henríquez/La Jornada/San Cristóbal de Las Casas, Chis. – La organización Xi’nich’ afirmó que a 18 años de la masacre de cinco personas ocurrida el 13 de noviembre de 2006 en la localidad de Viejo Velasco, municipio de Ocosingo, “sigue en la impunidad y en el olvido”.
“Son 18 años de impunidad. 18 años en los que los gobiernos en turno no han garantizado que crímenes como el de Viejo Velasco no se repitan; por el contrario, vemos que la falta de justicia lleva a nuevos hechos similares”, agregó en un pronunciamiento.
“El día de hoy, 13 de noviembre del 2024, estamos reunidos en asamblea general de la organización: el Comité de Defensa de la Libertad Indígena Xinich, familiares de las víctimas y sobrevivientes, y el sentimiento humano que invade nuestro corazón sangra de tristeza y dolor, como el primer día de la cruel y cobarde masacre”, señaló.
“No tuvieron alma ni corazón los gobiernos de esos tiempos al asesinar a los hermanos indígenas de Viejo Velasco. Compraron y armaron a los hermanos (de la comunidad de Nueva Palestina) y a los lacandones, aliados de los gobiernos de ese entonces. Asesinaron a María Núñez González, que estaba embarazada; a Filemón Benítez Pérez y Antonio Mayor Benítez; los restos óseos de otros dos hermanos fueron encontrados cinco años más”, señaló.
La agrupación, a la que pertenecían las víctimas, manifestó que “años más tarde falleció Petrona Núñez González, por los impactos sicológicos de la masacre. Ella fue secuestrada y arrastrada en plena selva hasta llegar a la comunidad de Nueva Palestina; con perversión, el gobierno liberó órdenes de aprehensión culpándola de matar a sus propios hermanos”.
Abundó: “Nos duele profundamente que este crimen se mantenga impune. Este gobierno que dejó Andrés Manuel López Obrador, de la 4 T, no escuchó ninguna palabra, ni hizo nada por darnos justicia. No fue de su interés mirar y resolver esta masacre de Viejo Velasco, como muchos otros asesinatos y desapariciones en todo México”.
Exigió al nuevo gobierno federal, “voluntad de poner en su agenda las masacres y desaparecidos de todo México; en especial la de Viejo Velasco, ubicado en la selva Lacandona, para que haya una justicia verdadera”.
Xinich’ también condenó “el cruel asesinato del jTtatik Marcelo Pérez Pérez, defensor de los pueblos indígenas y de la paz, ocurrido el 20 de octubre en San Cristóbal”, al tiempo que exigió al gobierno mexicano “justicia y verdad por este crimen de Estado”.
