El tatuador Ichi Hatano pasa de la piel al lienzo en la exposición CripTokio

0
16
CripTokio es la primera exposición de Ichi Hatano, tatuador que se convirtió en artista digital. Foto: AFP
CripTokio es la primera exposición de Ichi Hatano, tatuador que se convirtió en artista digital. Foto: AFP
  • “Es la primera exposición de criptoarte jamás montada en Tokio”, afirma su curador

Tokio.- . Ichi Hatano es tatuador en Tokio pero, desde la pandemia, su clientela, a menudo extranjera, se redujo. Así que cuando oyó hablar de la explosión del mercado del arte digital gracias a la tecnología blockchain (cadena de bloques) decidió lanzarse y ahora presenta la muestra CripTokio.

Es genial para un artista tener un nuevo mercado que se abre, eso crea muchas posibilidades”, dijo Ichi Hatano, de 44 años de edad , en su salón de tatuajes tapizado con sus motivos predilectos.

Pasar de la piel humana al arte desmaterializado no lo perturba. “Mi trabajo es el mismo, mi proceso creativo también”, comenta.

Ichi Hatano nunca vendió una obra virtual, pero dice “sentir” el potencial de este mercado mientras presenta cinco obras de esta categoría en la exposición CripTokio, en una galería del barrio de Harajuku.

Es la primera exposición de criptoarte jamás montada en Tokio”, afirma su curador de 27 años, Sascha Bailey, director general de Blockchain Art Exchange (BAE), plataforma de venta en línea especializada en este segmento.

La blockchain, una tecnología descentralizada y segura de almacenamiento y transmisión de información, presente en el corazón de criptomonedas como el

bitcoin, hizo estallar el mercado mundial del arte digital.

Porque al estar asociada con NFT (ficha criptográfica) –certificados de propiedad basados en la blockchain– cualquier creación virtual puede ser objeto de transacciones comerciales.

SENSACIÓN DE FLORES

TeamLab Planets, el museo japonés en el que el visitante camina y se convierte en una de las flores, presenta diferentes instalaciones inmersivas. La primera, Floating flower garden: flowers and I are the same, de Toshiyuki Inoko; la segunda, Drawing on the water surface y la tercera, Floating in the falling universe of flowers.

Los visitantes entran al museo descalzos y junto con los otros asistentes se vuelven parte de la obra. (Afp)

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here