Con la finalidad de acercar a los integrantes de la familia, sobre todo a los niños y jóvenes, a la experiencia de conocer y hacer música, mediante un lúdico y sencillo aprendizaje de los conceptos básicos como pulso, ritmo, notas, figuras rítmicas y entonación; el etnomusicólogo e instrumentista Alberto Salas Garcés articuló una serie de cinco videos, de tres minutos cada uno, los cuales se pueden consultar en https://www.youtube.com/playlist?list=PLZkVtNO_DEluzDGND_ETxxYcH62kTFr1
Se trata de adquirir los conocimientos básicos para disfrutar la música, explicó Salas Garcés, en charla con La Jornada.
“Aprender, experimentar y poner en práctica conceptos musicales, es fundamental para la educación integral, pues, como muchos estudios han demostrado, la música tiene efectos positivos en el desarrollo cognitivo, creativo, intelectual, emocional y psicológico de niños, niñas y jóvenes”; apuntó el también maestro, para la introducción de los videos.
“Dada la situación que enfrentamos con la contingencia sanitaria, poner al alcance de todas las personas, aspectos básicos de la teoría musical, no sólo contribuye a interrelacionar conocimientos, sino que también fomenta la sensibilización, la conexión con uno mismo, la colaboración y el respeto; cualidades fundamentales para transitar positivamente el momento histórico que ahora experimentamos”.
El propósito de esos cinco videos “es el aprendizaje lúdico de conceptos como pulso, ritmo, el color de las notas por cómo suenan, su ubicación en el teclado y entonación,con los que puedan crear, de manera individual o en familia, una o varias piezas musicales sencillas”.
De acuerdo con Salas Garcés, se trata de unos ejercicios muy didácticos, que permiten a cualquier persona que no sepa nada de música, desarrollar su sentido creativo. “Son ejercicios que implican el canto y la percusión corporal; que han sido probados en distintos grupos y comunidades. Desde la señora de la tienda de la esquina, el zapatero, hasta la mamá, ama de casa y la hija. Se trata de llegar a esas personas, que no se van a dedicar de manera profesional a la música, pero que al menos desarrolle la capacidad del pulso, el ritmo y las notas”. (La Jornada)