Desde luego que en nada le gustó el anuncio panista-perredista de aliarse en 2018, para la presidencia de México.
Andrés Manuel López Obrador de inmediato emitió un airado video por redes sociales en el que califica de paleros de Enrique Peña Nieto a Alejandra Barrales y a Ricardo Anaya, cuando en la política mexicana se tiene que tener todos los riesgos medidos y hasta los imposibles, como éste anuncio.
Para el tabasqueño se trata de una simulación, seguramente en la idea de disminuir la presencia de Morena con rumbo a la presidencia con él como abanderado.
Candidato y frente únicos anunciados, afirmó, serían “una simulación”.
E igual y sí: no dejarlo llegar.
El punto es que simplista, AMLO aseguró que si realmente Anaya y Barrales quisieran sacar al PRI del poder, se hubieran aliado en las elecciones del Estado de México, pero que no lo hicieron simplemente porque “Peña Nieto no se los permitió”.
Es otro escenario: la grande es la grande, y parece que no hay moral ni ética política para ese fin.
