Ciudad de México l La fortaleza de la economía mexicana para enfrentar la caída de precios en materias primas, del menor dinamismo en las exportaciones deriva de una mayor recaudación entre los contribuyentes, que creció en los últimos tres años en una proporción equivalente a 5.4 puntos porcentuales del producto interno bruto (PIB), reconoció el secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray Caso.
“Podemos afirmar que sin el incremento observado en la recaudación no tendríamos la capacidad de enfrentar con éxito, conservando la estabilidad, los retos de la economía global”, dijo en la 50 asamblea del Consejo Interamericano de Administraciones Tributarias (CIAT).
Allí, el funcionario resaltó que la recaudación no petrolera, y particularmente de los impuestos sobre la renta (ISR) y al valor agregado (IVA), pasó de representar en 2012 el 8.4 por ciento del PIB a 13 por ciento en 2015.
“El crecimiento económico de América Latina encuentra hoy necesariamente, en la recaudación tributaria, uno de los pilares más importantes para salir adelante.
En el caso de México, gracias a las mejorar en la recaudación estamos pudiendo enfrentar exitosamente la caída de los precios del petróleo. Apenas en 2012 los ingresos de la recaudación petrolera representaba el 39 por ciento de los ingresos; es decir, más de una tercera parte de los ingresos provenían de la actividad petrolera. A partir de la reforma hacendaria en 2013 y entró en vigor en 2014, la cifra cambió de manera importante: en 2015 la recaudación petrolera fue sólo 19 por ciento y la recaudación tributaria no petrolera pasó de 8.4 por ciento del PIB a más de 13 por ciento del PIB. Este es el incremento más importante de los últimos 25 años”, dijo.
También mencionó que el número de contribuyentes registró un crecimiento de 35 por ciento, lo que equivale a 3 millones 250 mil nuevos causantes que aportan fiscalmente, en particular bajo el nuevo esquema conocido como Régimen de Incorporación Fiscal.
