Ciudad de México l Casi el 60 por ciento de las emisiones contaminantes generadas por los vehículos automotores que usan gasolina, diésel o gas como combustible podrán disminuirse con un nuevo dispositivo desarrollado por un mexicano.
El inventor Pedro Castañeda Jiménez basó su proyecto en el principio químico de la electrólisis, lo que permite purificar los gases emitidos por la combustión sin impactar de manera negativa en el rendimiento ni en la potencia del motor.
El aparato se instala junto al motor y se interconecta a la admisión de aire del vehículo, cerca del sistema de inyección, explicó Castañeda en una entrevista con la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
“Al encender el vehículo, el hidrógeno entra al sistema debido a que es un elemento ligero que cuenta con 138 octanos, lo que permite eliminar los contaminantes”, dijo el inventor originario del estado de Baja California.
La construcción del primer prototipo, llamado generador de hidrógeno, tomó poco más de dos años y hace poco se aprobaron con éxito las pruebas técnicas a la que fue sometido por parte de la Secretaría de Protección al Ambiente de Baja California (SPA).
En las pruebas técnicas realizadas por el organismo estatal, bajo los parámetros que impone el Programa de Verificación Vehicular Ambiental, se comprobó que el generador de hidrógeno disminuye en promedio 60 por ciento las emisiones de monóxido de carbono (CO).
El dispositivo también es capaz de bajar el dióxido de nitrógeno (NO2) e hidrocarburos (HC) generadas por los motores de los vehículos.
Debido a que el prototipo no genera oxidación en sus celdas, garantiza una reducción eficiente de los niveles de gases contaminantes emitidos, resaltó Castañeda Jimémez.
El generador de hidrógeno tendrá un precio estimado de tres mil 500 pesos, una cantidad de cierta forma baja si se compara con el costo de reparar el motor de un vehículo que rebasa los niveles máximos de emisiones contaminantes, indicó el desarrollador.
El dispositivo no requiere de mantenimiento ni ajustes, ya que sólo el conductor del vehículo será el encargado de rellenar con agua electrolizada el depósito del generador, para mantener la conductividad de sus celdas internas.
“Al cliente que lo adquiera se le garantizará satisfacción total, ya que podrá probarlo por 15 días y si no hay resultados, se le hará la devolución total del importe”, aseguró.
El equipo se encuentra en trámite de patente ante el Instituto de la Propiedad Intelectual (IMPI), con el nombre Generador de hidrógeno y oxígeno a través de agua sin provocar oxidación de las placas debido a la producción carente de contaminantes.
Castañeda Jiménez busca inversionistas y alianzas estratégicas que le permitan fabricar en serie el generador de hidrógeno con materiales resistentes y de alta calidad, pero con el objetivo de mantener su precio en la comercialización.
“Todavía falta desarrollar el plan de negocios y marketing para posicionar el producto a nivel nacional, pero los primeros pasos ya están dados. Que sus celdas no se oxiden, que bajen en más de 60 por ciento los contaminantes de vehículos, así como haber solicitado el registro de sus derechos ante el IMPI”, mencionó.