NACIONAL

Elaboran reforma conjunta de ley contra violencia de género

La Comisión de Equidad y Género de la Cámara de Diputados, la Iniciativa Spotligth de la ONU-Mujeres, y el Consejo Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), anunciaron que elaboran en conjunto una reforma profunda a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida libre de Violencia Alerta de Género porque de las 18 alertas declaradas en igual número de estados en el país ninguna se cumple, dado que en los 411 municipios donde ocurren los feminicidios las alcaldías son absolutamente omisas de perseguir a los culpables.

Candelaria Ochoa, comisionada nacional del Conavim, expuso que la iniciativa presentada en San Lázaro –que se deriva del trabajo de la pasada legislatura- se tipifica la Violencia feminicida, como “la forma extrema de violencia de genero contra las mujeres y niñas, producto de la violación de sus derechos humanos en los ámbitos público y privado, conformada por el conjunto de conductas misóginas que pueden conllevar impunidad social y del Estado y puede culminar en feminicidio.”

Así, el feminicidio es la privación de la vida de una mujer, de cualquier edad, por razones de género, existen razones de género cuando concurran las siguientes circunstancias, la víctima presente signos de violencia sexual de cualquier tipo; a la víctima se le hayan infligido lesiones infamantes o degradantes o mutilaciones, previas o posteriores a la privación de la vida; existan antecedentes o datos de cualquier tipo de violencia en el ámbito familiar, laboral, escolar, institucional, o comunitario.

En San Lázaro, durante la mesa de trabajo, también se determinó que en la iniciativa se manifiesta que, en la alerta de violencia de género, toda muerte violenta de mujer deberá investigarse desde un inicio como feminicidio, incluyendo aparentes suicidios, para descartar que no existan razones de género en su comisión.

Y por tal razón, los poderes legislativos estatales deberán homologar la tipificación penal de esta conducta conforme las hipótesis de las razones de género:

“Las autoridades federales, estatales, de la Ciudad de México y municipales que correspondan, estarán obligadas en términos de esta Ley a dar cumplimiento a los requerimientos de información, apoyo y determinaciones que se emitan para hacer frente a la contingencia de Alerta por Violencia, en el entendido de que sus omisiones, obstaculizaciones o negativas serán causa de responsabilidad jurídica a la que haya lugar.”

Candelaria Ochoa, anunció la propuesta de crear las contralorías de las alertas de género, “porque hoy tenemos 411 alertas o 411 municipios en 18 estados y, en realidad, ha sido complejo porque no nos acompañamos en términos mucho más activos, pero, yo diría, mucho más específicos. Todavía hoy los informes que nos entregan los estados son informes muy abstractos que no tienen acciones concretas; hoy la alerta tiene una fecha de inicio, pero no de término, porque no cuenta con indicadores, porque no cuenta con medidas de impacto.”

Si bien la declaratoria de identifica y reconoce las violencias, “hoy tenemos poca efectividad de las mismas porque no tenemos una medición de impacto de las acciones que se realizan en los estados. Y luego, los municipios no tienen sus planes de trabajo; entonces, la alerta se declara en un municipio –hoy tenemos 411- pero pareciera que sólo el estado es el que tiene la alerta y los municipios no están retratados, no tienen un plan municipal para atender esa alerta.”

Nayeli Sánchez coordinadora de la iniciativa Spotlight en ONU Mujeres, conminó al Congreso a incidir en normas claras que se lleven a la práctica paras castigar la ominosa violencia contra las niñas, pues “es un tema que ha ido creciendo de una manera alarmante, el feminicidio de las niñas. Tenemos que revisar, por supuesto, cómo estamos haciendo la evaluación de riesgos con niñas, ahí tenemos un gran tema con los centros de justicia, con todos los operadores de justicia, porque es verdad que en el tema de niñas nos cuesta muchísimo más trabajo, considerando los diferentes momentos y edades de las niñas”.

“No es lo mismo una evaluación de riesgo con una niña de cinco, seis años, que con una niña que ya es una joven en la adolescencia, que pueda tener otras herramientas o que esté muy cercana a la mayoría de edad, son momentos muy diferentes y ahí, sí que tenemos que hacer una reflexión institucional fuerte, por el crecimiento de estas tasas de feminicidio…no podemos seguir dictando alertas de género hasta el infinito, porque ha llegado un momento en el que todo el país tiene alerta de violencia de género, y qué va a pasar, cuándo tendrían que detenerse, qué hace que este mecanismo urgente sea verdaderamente transformador de las condiciones de violencia contra las mujeres y contra las niñas”.

La presidenta de la Comisión de Equidad y Género, Wendy Briseño (Morena), calificó de una emergencia nacional el registro de número de mujeres asesinadas, violentadas y desaparecidas a nivel municipal, estatal y nacional: dejaron de ser un hecho aislado, si es que alguna vez lo fueron, y se acercan, y lo sabemos bien, a una violencia estructural en todas las entidades, subrayó.

“El espíritu de la Alerta por Violencia de Género contra las Mujeres obliga a las autoridades a mayores ejercicios de transparencia, rendición de cuentas y procuración de justicia, tanto para las 18 entidades alertadas y los 411 municipios… estas deben ser las prioridades, los escrutinios deben responder a resultados, más allá de politizaciones locales o nacionales, y lo entendemos, cuando se declara una alerta, luego hay quien se incomoda mucho, pero estamos aquí para ir más allá de todo eso.”

(La Jornada)

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