Con valor de mujer Ni más ni menos
Candelaria Rodriguez Sosa
Menos exhibición y más acción de la federación en atención a personas damnificadas de Chiapas
El gobierno y su responsabilidad para garantizar seguridad y bienestar a personas afectadas por el terremoto que cimbro a Chiapas y Oaxaca hace 13 días. Falta un informe general a la población de las acciones realizadas.
“Ahora si hemos hecho equipo”, dijo ayer el presidente de México, Enrique Peña Nieto, en una entrevista al periodista José Cárdenas en Tele fórmula, referirse al cierre de filas de los 24 mil servidores públicos federales y estatales para atender los daños del terremoto de magnitud de 8.2 que cimbro a Chiapas y Oaxaca el pasado jueves 7 de septiembre.
El presidente de la república con más memes caricaturesco, por cada error que comete, y con una baja calificación en la aprobación por el deterioro económico, los despidos cuando habla de más empleo, y brutal recorte presupuestal que golpea a los hogares, muchos bajo la tutela de las mujeres, madres, esposas, y precisamente que han impactado a programas que benefician al sector femenino hoy orgulloso habla de que por primera vez se ha hecho equipo. Digo, sería absurdo no hacerlo, y pese a todo, la gente no cree. A pesar de todo, sigue la pasarela disfrazada con el dolor que nos duele, de los que sentimos, vimos y padecimos y padecemos.
Los efectos colaterales del terremoto que, en Chiapas y Oaxaca, los estados que se colocan en primero y segundo lugar de desigualdad en el país en pobreza, educación, salud, empleo, donde se ha canalizados millonarios presupuestos federales, hoy el terremoto, puso a temblar a la autoridad ante la fisonomía nacional e internacional que descubre, redescubre y saca a flote la miseria, la pobreza ancestral de la ciudadanía oaxaqueña y chiapanecas. Las ruinas que caen sobre ruinas. Los llantos contenidos, salen, asoman para sacar los sentimientos de desilusión que golpean al abandono, derivado de los desvíos de recursos, de un mal diseño de los programas que como el Progresa, o su similar Amanecer solo son paliativos porque no han arrojado resultados que permitan observar la eficiencia y eficacia que implique reducir los cuatro factores con que se mide la desigualdad estructural.
Ninguna gracia hace el funcionariado. Considero que deben cambiar de discursos, y dar resultados. Así como vamos en el recuento de las réplicas de manera puntal, así debe darse resultados. Pero como en cada gobierno lo viene realizando sean estos de tres, cuatro o seis años, quienes pese a saberse ganadores de un proceso electoral, comienzan de cero, e inician y pierden un año en el diagnostico, diseño la estrategia, y le siguen las metas, objetivos, actividades y acciones, que habrán de medirse a través de indicadores de que deben ser eficaces y eficientes. Así, en estas emergencias, o como la misma emergencia de la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres, y como hay un desorden administrativo y desconocimiento del tema en las instituciones, las emergencias no logran atender la demanda, las reales necesidades, y en tanto, la desconfianza permea.
Antes de seguir, expreso aquí mi posición con respecto a la visita de los más de 24 mil funcionarios. Yo digo que en provincia lo hacemos, y la posición es el funcionariado federal pague sus gastos, para que sea apoyo real y se vea que lo realmente lo sienten por el sufrimiento de las y los Oaxaqueños y Chiapanecos. Solo así, se podrá creer y que el gobierno informe cuanto esta gastando en gastos, de los que vienen a supervisar, pasear o turistear. Ayer el presidente ya adelanto que en la reparación de escuelas para ambos estados será alrededor de 2 mil millones de peso, con datos preliminares.
Me pregunto ¿hasta ahora cerraron filas los más de 24 mil funcionarios? Que incluye a toda la estructura de la administración pública, órganos descentrados y descentralizados, y después de 5 años en el poder, para atender los daños, donde el terremoto solo vino a exponer a su máximo esplendor la pobreza. Hoy el funcionariado visita Chiapas, en especial los 97 municipios afectados y contemplados en la Declaración de alerta donde con el 99% de esos municipios tiene pobreza y pobreza extrema.
Veo, leo como los funcionarios federales y estatales toman los medios para informar lo que hacen, viajan con gastos pagados por el erario a Chiapas y Oaxaca, y llenan los hoteles, las oficinas, cercanas a Oaxaca y Chiapas, para “coordinarse, supervisar, vigilar” y demás. ¿Que acaso no es su obligación? Menos exhibición y mas acción. Digo. Cuando hablan de lo que hacen, pienso ¿quieren aplausos?
Por otro lado, justo es que sean las y los funcionarios quienes se paguen sus gastos, con sus propios recursos, así como se trabaja en Chiapas desde las oficinas de la administración pública donde año con año, no hay viáticos, no hay gasolina, donde el personal comprometido compra papelería, insumos, pone sus vehículos, se paga sus comidas y busca barato para que ajuste la quincena. ¿Así están trabajando el funcionariado que viene del centro del país?, ¿así trabajan los delegados de la federación? o siguen sangrando erario estatal y federal cuando debe canalizarse a resarcir los daños elementales que golpea a las y los chiapanecos/as.
Como inicie termino, y me remita a los años de existencia del primer mandato presidencial en México hace 23 años, cuando en 1824 Guadalupe Victoria asumió la primera presidencia, fecha en que en México los gobiernos pasan de grupos y familias de políticos con las consecuencias que hoy conocemos, y las pocas esperanzas que tienen las y los mexicanos para vivir el país que no prometen progresivo y prospero como lo marcan los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo.
Hay quienes en la defensa de las acciones del gobierno se desgarran las vestiduras para defender lo las autoridades que como patriarcas o matriarcas tratan a la humanidad, a la ciudadanía como sus cotos de poder, en total deshumanidad.
Cada una de las personas que han peleado, disputado el poder con violencia psicológica, a fuego y sangre, y que lo asumen bajo el engaño y el fraude, que siendo legitimo no es legal, entonces tienen una gran responsabilidad, pues arrebatado el triunfo en elecciones maquilladas, con votos engañosos por la compra, tienen la obligación de cumplir. La mayor tragedia que debió mover los sentimientos de la Nación no deja claridad en sus acciones, sigue siendo declaraciones.
Mientras 2, 700 replicas han seguido después de la magnitud de 8.2. Movimientos que mantiene en una situación de incertidumbre donde la ciudadanía se mueve, trabaja, vive y convive en medio del miedo y temor, con afectaciones emocionales. Entre aliviar esas emociones, la infancia espera que sus escuelas ruinas de ruinas, sean reparadas, 262 totalmente destruidas 86 en Chiapas y 176 en Oaxaca, pero con daños colaterales 2 mil 678 correspondiendo 1, 072 a Oaxaca y 1,606 en Chiapas.
Y entre los ires y venires del funcionariado, 250 mil personas afectadas esta a la espera de la “buena voluntad” del gobierno que “todo le duele”, tanatológicamente no pueden sentir lo que el otro sientes, no puedes sentir lo que la otra persona siente, respuestas a la desgracia, sin mayor preámbulo, porque as perdidas de todo tipo, duelen y lastima, y más en esos lugares de pobreza donde cada barda caída duele porque es el fruto de su trabajo, del esfuerzo, para vivir bajo un techo, solo para a guarecerse de la lluvia y el sol, y dormir en el cobijo de la armoniosa familia., y para colmo se cayeron 200 templos donde se refugian para reencontrarse con su ser superior, con sus ancestros, con su Dios.
Si, si quiero creer, pero el funcionariado debe responder, son seres humanos que pueden corregir a favor de la humanidad. Los habitantes de este último girón de tierras mexicanas, olvidados de la federación, donde cada gobierno que llega le arrebata sus riquezas. Hoy están aquí, hay que pedir cuentas. Y que vengan aquellas constructoras que los gobiernos de todos lo gobiernos de siempre han contratado y despojado de sus trabajos a los constructores chiapanecos, esas constructoras que venga a pagar lo que se han llevado de Chiapas. Que vengan y hablen e informen.
