Necesario ajustes al gasto público o habrá consecuencias: Carstens

Ciudad de México l Si no se aplican ajustes al gasto público, particularmente a Petróleos Mexicanos (Pemex), la economía mexicana enfrentará sensibles consecuencias, como una política monetaria más restrictiva, afirmó el gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens.
“De lo contrario, el proceso de ajuste sería mucho más largo y doloroso, donde sin duda nosotros tendríamos que aumentar mucho más las tasas de interés; creo que ahora que está iniciando el año es un buen momento para que realmente se refleje en el gasto público la nueva realidad de un precio 70 por ciento más bajo de lo presupuestado (del petróleo)”, explicó.
No obstante, frente al adverso contexto internacional, consideró que la economía mexicana va en recuperación, toda vez que existen condiciones para que alcance en este 2016 un crecimiento de un poco más de 2.5 por ciento, pero destacó la necesidad de ajustar el gasto público.
De esta manera, afirmó que el banco mantiene su pronóstico de crecimiento económico para este 2016, el cual oscila en un rango de entre 2.5 y 3.5 por ciento, planteado en su último reporte de inflación, correspondiente al tercer trimestre de 2015.
Incluso, la previsión se coloca ligeramente abajo del 2.69 por ciento que pronosticaron en enero pasado los economistas del sector privado consultados por el banco central.
Por lo anterior, Agustín Carstens considera que la economía mexicana estaría en proceso de recuperación, tomando en consideración que en este 2016 el Producto Interno Bruto (PIB), alcanzaría un crecimiento de “un poco más” de 2.5 por ciento, mientras que en 2015, de acuerdo a cifras preliminares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), se habría alcanzado una expansión de 2.5 por ciento.
En materia de inflación, agregó el Gobernador del Banxico durante una conferencia que ofreció en la Universidad Panamericana, los precios al consumidor se han mantenido estables, a pesar del alza en el tipo de cambio (el dólar ha superado los 19 pesos en jornadas pasadas), y muestra de ello es que en 2015 la inflación se colocó en un mínimo histórico de 2.13 por ciento.
No obstante, reconoció que la economía mexicana enfrenta diversos retos, y uno de ello es la caída en el precio del petróleo, lo cual genera presiones a las finanzas públicas del país por los menores ingresos que se obtienen por la venta de crudo.
Al respecto, caber recordar que el jueves pasado la Junta de Gobierno del Banxico determinó mantener su tasa de interés referencial en 3.25 por ciento, en línea con la decisión que adoptó una semana previa la Reserva Federal de Estados Unidos, en el sentido de tampoco ajustar su tasa de interés.
Por ello, Agustín Carstens consideró que lo más acertado es que en este momento sea el Gobierno quien absorba el choque provocado por los menores ingresos petroleros para preservar la fortaleza de la economía.
“Si el gasto público se ajusta conforme a lo que corresponda, dado los ingresos que se esperan obtener, pues haría más eficiente el ajuste al choque tan brutal que recibimos por la caída en el precio del petróleo y parte de eso lamentablemente tiene que ser en Pemex”, comentó.